La fundadora de la reconocida firma peruana, nos abre las puertas de su estudio para brindarnos una conversación honesta y personal sobre los retos como directora creativa de Escvdo.
Por Itzari Briceño
Más que un espacio dedicado a la venta, el showroom de la firma peruana ESCVDO, es una experiencia que permite a los visitantes conocer de cerca la tradición textil del Perú y respirar el ADN de la marca. Su fundadora y directora creativa, Chiara Macchiavello, se propuso crear un espacio transparente donde se pueda conocer en profundidad el trabajo de la marca con las diversas comunidades tejedoras del país.
“Este es mi mundo” comenta Chiara mientras señala el moodboard en su estudio, “acá vivo todos los días creando, tratando de innovar a través del tejido y de hablar este lenguaje milenario que forma parte del ADN del peruano” señala la directora creativa.
Nuestro ‘taller camión’ es parte fundamental de lo que es ESCVDO, es nuestro centro de operaciones, donde esta toda el área logística de la producción y a donde llegan todas piezas desde provincia para el control de calidad.
El espacio ubicado en el distrito limeño de Barranco, más que un showroom es una experiencia a través del universo de la firma. “Cuando llegas aquí no se trata solamente de ver las colecciones permanentes de invierno o verano, sino también conocer más de cerca el trabajo que hacemos, porque aquí tienes toda la experiencia de ver las oficinas, el estudio y el taller” comenta Chiara.
En este sentido, uno de los aspectos más resaltantes del espacio, es el inmenso telar de pedal tradicional que se encuentra situado en medio de la exhibición. “Este telar lo usamos en cada inicio de colección, para explorar los diferentes tejidos y materiales, de aquí es donde salen todas las muestras de cada colección, que luego son repartidas entre las diversas comunidades tejedoras en provincia” agrega.
Empezamos en un lugar en la Sierra Central de Huancavelica y hoy somos una red articulada con más de 300 familias en las tres regiones.
Así como este telar, las curiosidades y detalles minuciosos que hay en cada rincón del estudio no parecen acabar. Incluso, la firma se enorgullece de tener el taller dentro de una camión de carga acondicionado, el cual es parte del largo viaje que realizan cada uno de sus diseños a través de todo el Perú durante su proceso de confección. “Nuestro ‘taller camión’ es parte fundamental de lo que es ESCVDO, es nuestro centro de operaciones, donde esta toda el área logística de la producción y a donde llegan todas piezas desde provincia para el control de calidad” explica Chiara.
En cada espacio, es palpable el amor e interés que su creadora siente por el Perú y sus tradiciones, misma afición que la llevó a crear una firma de moda contemporánea que revaloriza la milenaria tradición textil peruana y apostar por el crecimiento de su país al crear una extensa red de comunidades tejedoras. “Empezamos en un lugar en la Sierra Central de Huancavelica y hoy somos una red articulada con más de 300 familias en las tres regiones” concluye con orgullo la creadora.