Unidos en la misión de promover el interiorismo peruano, la Asociación de Diseñadores de Interiores del Perú (DID) fusiona creatividad y preservación del patrimonio histórico del país.
Este grupo de diseñadores revitaliza el panorama local mediante la restauración de casonas históricas, la descentralización del conocimiento y la formación de nuevos artesanos, creando un legado cultural y económico duradero. En una conversación con Erika Zielinski, conocemos más sobre la inspiradora labor de este grupo y cómo están revalorizando el interiorismo en el país.
En el vibrante universo del diseño peruano, una entidad se alza con una misión clara y ambiciosa: agrupar a los interioristas bajo un mismo estandarte, formalizando y fortaleciendo las relaciones entre marcas, proveedores y profesionales del sector. Así nace la Asociación de Diseñadores de Interiores del Perú (DID), una respuesta a la necesidad de consolidar la industria del diseño de interiores en el país, y que hoy se posiciona como un faro de innovación y excelencia en el panorama nacional.
La misión del DID en Perú trasciende los límites del diseño de interiores convencional, aspirando a convertirse en un agente de cambio que fusiona la creatividad con la responsabilidad social y la preservación del patrimonio. A través de su compromiso con la promoción de eventos culturales, educativos y la restauración de casonas históricas, el DID busca descentralizar el diseño, llevando la innovación a cada rincón del país y revitalizando comunidades enteras. Su visión es que el diseño de interiores no solo embellezca espacios, sino que también narre historias, promueva la identidad cultural y cree un legado perdurable para las generaciones venideras.
Con una directiva compuesta por visionarios como Mari Cooper, presidenta de la asociación, y los vicepresidentes Diego Olivera y Carla Canepa, junto a un equipo de diseñadores destacados como Ana Teresa Vega Soyer, Jessie D’Angelo, Karim Chaman, Erika Zielinsky, Fiorella Milla-León y Porfirio Castro, DID Perú no solo se posiciona como un líder en la industria del diseño de interiores, sino que también se convierte en un necesario agente de cambio social y cultural.
UNA COMUNIDAD DE DISEÑADORES UNIDOS
En el seno del DID, una comunidad de diseñadores interioristas encuentra su hogar. Son profesionales apasionados por el diseño de interiores, comprometidos con fortalecer los lazos entre sus miembros y la rica herencia cultural del Perú. Con una visión inclusiva y colaborativa, el DID ofrece una plataforma donde interioristas y empresas del sector pueden desarrollarse profesionalmente, promoviendo la excelencia y la participación activa en la sociedad.
Nuestro propósito es agruparnos como gremio, protegernos, nutrir nuestras habilidades y mejorar continuamente a través de charlas, exhibiciones, eventos y obras sociales.
Con más de 60 miembros activos, la asociación se erige como un ente activo los 365 días del año con diversas actividades que nutren al creciente sector del diseño en Perú. En palabras de Erika Zielinski, directora y asociada del DID: “Nuestro propósito es agruparnos como gremio, protegernos, nutrir nuestras habilidades y mejorar continuamente a través de charlas, exhibiciones, eventos y obras sociales”. Cada miembro del DID aporta su talento y visión única, contribuyendo a la vitalidad y el crecimiento del sector del diseño de interiores en el país.
LA SEMANA DEL DISEÑO: UNA CELEBRACIÓN A LA CREATIVIDAD Y LA INNOVACIÓN
Inspirados por la prestigiosa Semana del Diseño de Milán, los miembros del DID se han embarcado en una tarea monumental: organizar la Semana del Diseño en Lima. Esta iniciativa, que abarca una serie de eventos y actividades, busca fomentar la creatividad, la innovación y el intercambio de ideas en el ámbito del diseño de interiores.
“La Semana del Diseño es un momento crucial para nuestra comunidad”, afirma Zielinski. “Es una oportunidad para celebrar el talento local, así como para conectarnos con diseñadores de todo el mundo y aprender de sus experiencias”.
Este evento anual consta de cinco ramas principales, cada una con su propio enfoque y propósito. En primer lugar, Casa DID: un proyecto emblemático que busca restaurar y revitalizar casonas históricas en el centro de Lima. Esta iniciativa no solo promueve la preservación del patrimonio arquitectónico, sino que también impulsa el turismo cultural y la actividad económica en la zona.
El éxito de Casa DID ha sido tan notable que el proyecto se expande este 2024 para centrarse en una quinta de los años 1920, compuesta por 14 casas.
Otra faceta destacada de la Semana del Diseño es la exposición de ‘Insólito’, que pone de relieve la labor de los artesanos locales y su contribución al mundo del diseño. Esta exhibición ofrece una plataforma para que los artesanos muestren su trabajo y se conecten con diseñadores e interesados en el diseño de interiores.
El concurso ‘Paisaje Urbano’ es otra parte integral de la Semana del Diseño, destinado a reconocer y premiar el talento de los paisajistas locales. Este concurso estimula la creatividad en el diseño de espacios públicos y promueve la importancia del paisajismo en el entorno urbano.
‘DID Conversa’ es un componente esencial de la Semana del Diseño, el cual ofrece un espacio para el diálogo y el intercambio de conocimientos entre profesionales del diseño de interiores. A través de paneles de discusión, conferencias y talleres, este evento permite a los participantes explorar tendencias emergentes, desafíos y oportunidades en la industria del diseño.
Por último, pero no menos importante, el recorrido de tiendas es una experiencia única que permite a los participantes descubrir las últimas tendencias en diseño de interiores mientras exploran boutiques y galerías en los distritos de San Isidro y Miraflores.
“La Semana del Diseño es una celebración de la creatividad y la innovación”, concluye Zielinski. “Es un momento para inspirarse, aprender y conectar con la comunidad global del diseño. Estamos emocionados de ser parte de este evento y esperamos que inspire a futuras generaciones de diseñadores peruanos”.
CASA DID: RESTAURANDO EL CORAZÓN DE LIMA
Dentro del marco de la Semana del Diseño, Casa DID se ha convertido en el proyecto central, enfocado en la revitalización del patrimonio arquitectónico de Lima. Iniciado en respuesta a la petición de la Beneficencia de Lima y PROLIMA, este proyecto sin fines de lucro trasciende la mera restauración de casonas históricas en el corazón de la ciudad. Pues, la restauración de estas casonas no es solo una cuestión de reparar daños estructurales; es un proceso que implica preservar la autenticidad de los edificios mientras se les infunde nueva vida. “El proceso de restauración es complejo y requiere un equilibrio entre la preservación histórica y la innovación arquitectónica”, explica Zielinski.
No solo estamos restaurando casonas, estamos construyendo un futuro sostenible para nuestra ciudad y preservando su rica historia para las generaciones venideras.
Erika Zielinski, directora y asociada del DID
Si bien uno de los mayores desafíos de Casa DID es la disponibilidad de fondos, la asociación cuenta con el apoyo de marcas aliadas, puesto que la restauración de estas casonas requiere de una inversión considerable. El equipo debe ser selectivo en cuanto a los proyectos a abordar, priorizando aquellos viables y dentro del presupuesto.
“Enfrentar estos desafíos financieros es crucial para el éxito de proyectos como Casa DID”, comenta Zielinski. “Se necesita una mayor colaboración por parte de instituciones financieras y otras entidades para garantizar la viabilidad a largo plazo de la restauración del centro histórico de Lima”. La inversión en este patrimonio no solo preservará la identidad cultural de la ciudad, sino que también impulsará su desarrollo económico y turístico en una zona tan importante para la ciudad.
Además de los desafíos financieros, los miembros del DID han identificado la necesidad de contar con un equipo de colaboradores especializados en técnicas adecuadas a las exigencias históricas de las casonas. En este sentido, el DID también se dedica a la capacitación de nuevos artesanos y trabajadores especializados. “Nuestro compromiso con la formación y el desarrollo de habilidades es fundamental para el éxito a largo plazo de los proyectos del DID”, concluye Zielinski. “No solo estamos restaurando casonas, estamos construyendo un futuro sostenible para nuestra ciudad y preservando su rica historia para las generaciones venideras”.
El éxito de Casa DID ha sido tan notable que el proyecto se expande este año para centrarse en una quinta de los años 1920, compuesta por 14 casas. Cada una será adoptada por una marca aliada y diseñada por miembros del DID. Este enfoque no solo busca la restauración estética, sino también convertir el centro de Lima en un destino turístico vibrante y lleno de vida. Con cada casona restaurada, Casa DID no solo rescata la arquitectura histórica, sino que también revitaliza el espíritu cultural y económico del centro de Lima.